sábado, 24 de diciembre de 2011

Spain is pain #10: Not a Christmas Carol.


En estas fechas navideñas en la que todos, o casi todos volvemos a casa por Navidad, nos convertimos en tópicos andantes: compras aceleradas de última hora, cenas de familias y de amigos, regalos que molan mucho y otros que decepcionan más. Y si, el que os habla se convierte en un zombi más que además vuelve a casa por Navidad. Ha sido en ese trayecto a casa de mis padres que iba pensando de que iba a hablar en el post de esta semana.
De hecho como ya estamos metidos en fiestas la primera idea era hacer una reseña de algún título que hiciera una referencia directa lo que se suele vivir en estos días. He tenido que hacer un poco de memoria he intentar recordar algunos de las tantas obras que hacen referencia a estas fechas. Por lo general estas se suelen dividir entre diferentes visiones que van desde la transmisión del mensaje buenrollista de la Navidad a aquellas que critican de manera despiadada la falsedad de estas fechas, pasando por homenajes y revisiones del clásico de Charles Dickens. De manera que desecho cualquiera de esas tres opciones.
Me quedaba pues buscar otra línea, otra lectura de la Navidad. Ayer en Madrid en plaza Callao frente al anuncio luminoso de Schweppes sonreí para mis adentros acordandome de la genial película de Alex de la Iglesia. Cinta que destila humor y mala leche por partes iguales. Entonces se enciende una lucecita en mi cabeza: 666/999 (Toutain Editor, 1988) de Beroy. Que es a la par el primer cómic de un autor español que recuerdo haber leído exceptuando, claro, la obra de Francisco Ibáñez.
Esta obra se desarrolla en los últimos días del año 1999 en el que una amenaza del pasado vuelve al presente en forma de una estatua que vendrá e imponer el caos a una sociedad decadentista. Destaca en esta narración la omisión de la Navidad tal y como la entendemos hoy día, es decir, una celebración entroncada en las costumbres rurales. Se nos muestra una sociedad urbana que parece haber absorbido hasta el último aliento de las fiestas buenrollistas y consumistas.
En este mundo creado por Beroy los religiosos son una especie de tecnócratas que tratan de evitar el fin del mundo a través de una paraciencia religiosa que lucha contra el poder de la iconografía, y que han dado paso a una civilización en la que el fin del mundo se convierte en el mayor evento que ha vivido la humanidad. En esa percepción ayuda la utilización del blanco y negro que dota de corporeidad a un Apocalipsis que pretende acentuar la decadencia de la sociedad.
Recomiendo profundamente 666/999 de Beroy considero que es una de las obras fundamentales del cómic de género español nacida tras la ola del underground patrio que se encuentra a medio camino entre la ruptura del periodo anterior y la década de los 90.

                                                                                                                                          @Mr_Miquelpg

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